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Mostrando entradas de febrero, 2021

LA MONTAÑA DE BUGARACH Y LA SALVACIÓN DEL APOCALIPSIS

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Bugarach es una diminuta comuna de unos 200 habitantes emplazada en el departamento de Aude, en la enigmática región de Languedoc-Rosellon. En principio, el lugar es ideal para sentirse en contacto con la naturaleza. Ubicado a los pies del monte Bugarach, de 1.231 metros y considerado el más alto del Macizo de Cobières, esta pequeña comuna siempre ha estado rodeada de leyendas un tanto singulares. Quizá se deba principalmente al extraño fenómeno geológico de la zona denominado cabalgamiento. Los estratos geológicos están situados al revés de lo común y habitual, es decir, las capas más antiguas estarían arriba mientras las más modernas se situarían abajo. Algo cuanto menos curioso y que ha dado pie a pensar que este lugar cuenta con la presencia de viajeros interestelares. Muchos son los que aseguran que el mismísimo Julio Verne encontró la inspiración en esta montaña para escribir el viaje al centro de la tierra. Muchas son también las leyendas que ubicarían en la cima de esta montaña...

SHAMBHALA, ¿UN LUGAR REAL O SOLO MITOS?

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El tibetano Lobsang Rampa dijo que muchas veces visitó un lugar místico con clima templado en lo alto del Himalaya. Y escribió:  El Tíbet es el país más conveniente de todos para los platillos voladores. Está alejado del bullicio del mundo cotidiano y está poblado por aquellos que anteponen la religión y los conceptos científicos a las ganancias materiales. A lo largo de los siglos, la gente del Tíbet ha sabido la verdad sobre los platillos voladores, qué son, por qué son, cómo funcionan y el propósito detrás de todo. Conocemos a la gente de los platillos voladores como los dioses en el cielo en sus carros de fuego. Pero permítanme relatar un incidente que ciertamente nunca se había contado antes en ningún país fuera del Tíbet, y que es absolutamente cierto, el día era amargo. Gránulos de hielo congelados impulsados ​​por el fuerte vendaval (tormenta), martillados como balas en nuestras túnicas aleteando y arrancando la piel de cualquier superficie expuesta. El cielo era de un vívi...