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Mostrando entradas de mayo, 2020

EL LICÁNTROPO DE CAUDE (1598, FRANCIA)

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En una zona un tanto aislada y poco concurrida en los alrededores de una pequeña localidad francesa llamada Caude, se halló el cadáver de un joven de 14 años aproximadamente. El cuerpo inerte se encontraba cubierto de sangre y sus extremidades habían sido cercenadas de una manera muy violenta. Los testigos de los hechos afirmaron que vieron a un par de lobos devorando al joven, pero al acercarse otros lugareños y revisar la zona, comprobaron que allí había un solo hombre, desnudo y escondido entre la vegetación.  Se trataba de Jacques Roulet, presunto hombre lobo y autor del crimen. Su cara estaba manchada en sangre fresca al igual que sus largas uñas, llenas también de restos de carne y grasa humana. Este individuo alegó que cada vez que se aplicaba una pomada, sus manos y pies se volvían patas de lobo, y la sed de sangre le hacía cometer estos actos de canibalismo.  Acabó pasando dos años internado en un rudimentario sitio para pacientes psiquiátricos, despu...

EL LICÁNTROPO DE ALLARIZ (1810, ESPAÑA)

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En cierto momento a principios del siglo XIX, se halló el cuerpo sin vida del alguacil de León (España) en circunstancias detestables, y fue el detonante para revelar las mortandades de un supuesto hombre lobo.  A raíz de este deceso, fueron apareciendo más cadáveres de mujeres en las mismas condiciones deplorables en Cantabria y Portugal, que se vinculaban claramente con el asesinato del alguacil. Se pudo identificar al facineroso gracias a los aldeanos que echaban de menos a esas damas desaparecidas, todas ellas se habían marchado con un tal Manuel Blanco Romasanta, para nunca más volver. Se trataba de un vendedor ambulante que despellejaba a sus víctimas y rascaba la grasa de sus pieles para crear un brebaje medicinal, que había alcanzado su récord de ventas por toda la zona a donde iba. Manuel confesó que mientras dormía, un oscuro deseo de matar le seducía y le obligaba a atacar a otras personas con sus garras y dientes para devorarlas.  Al principio, s...

EL LICÁNTROPO DE CHALONS (1597, FRANCIA)

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En una pequeña localidad francesa llamada Chalons, sucedió que comenzaron a desaparecer varios niños y a encontrarse cadáveres humanos en el bosque con la garganta degollada, en un estado ignominioso. El autor confeso de estas aborrecibles muertes resultó ser el sastre del pueblo.  No se tiene conocimiento de su nombre verdadero, ya que mucha información fue abolida en su momento, pero su modus operandi consistía en atraer a los infantes a él ofreciéndoles dulces. De este modo, encerraba a sus víctimas en el desván de su negocio y abusaba de ellas sexualmente, antes de desmembrarlas.  De hecho, en su casa se encontraron varios barriles llenos de huesos de infantes. Cuando el sastre agotaba su aprovisionamiento, emergía de noche al bosque para acechar a nuevas presas. A este individuo le condenaron a morir en la hoguera, después de que el alguacil y demás pobladores escucharon su versión de lo sucedido. El sastre narró que entraba en trance y se convertía en homb...

EL KAPPA (河童)

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Es uno de los demonios del folclor japonés más populares. Es un demonio que vive en el agua y que, de acuerdo a las leyendas japonesas, vive en los ríos y pantanos de Japón. Es un monstruo letal y también bromista. En la religión sintoísta, el kappa era considerado un dios del agua (水神).  Los kappa tienen forma humanoide y poseen la estatura de un niño. Existen ilustraciones antiguas de los kappa que los representan así, algunos se asemejan a monos y hay otros que tienen un pico e incluso un caparazón de tortuga. Inclusive, en otras ilustraciones aparecen con un aspecto de reptil. Los kappa pueden nadar como un pez gracias a sus peculiaridades anfibias, como manos y pies palmeados.  Una particularidad de estas criaturas es que tienen un cráneo humanoide y posee un recipiente en la parte superior de su cabeza llena con agua. Supuestamente es su fuente de vida. Si se seca, el kappa muere, a menos que regrese al agua. Una manera de matarlos precisamente es saludarlo...